lunes, 31 de diciembre de 2012

Crema de nécoras

Y aquí va uno de mis platos favoritos, que siempre hago para Navidad, al igual que la sopa de pescado y marisco de mi madre que no puede fallar para Nochevieja, a ver si este año la pillo, cámara en mano, haciéndola.


Además, le gusta mucho también a mi marido, que no es muy dado a los alimentos del mar, se le nota que es de un lugar sin puerto de mar, pero a la crema de nécoras no le hace ningún asco, es más, es lo que pide de comida para el día de su cumpleaños.

Ingredientes:

- 6 nécoras
- 2 cebollas grandes
- 4 zanahorias
- 2 tomates natural grande
- 1 pimento verde
- 2 cucharadas de maizena
- 50 gr. de mantequilla
- 1,5 litros de fumet de pescado o agua con 2 pastillas avecrem pescado.
- 2 cucharaditas de pimentón dulce
- 50 ml. de coñac 
- 100 ml. de sidra (opcional)

Preparación:

Ponemos en una cacerola la mantequilla a derretirse y añadimos la verdura picada para que se vaya haciendo.




Cuando estén bien rehogadas, añadimos dos cucharaditas de pimentón, dos cucharadas de maizena y las nécoras previamente machacadas en un mortero y simplemente troceadas. 



Removemos bien, que no vaya a pegar la harina.


Seguidamente añadimos el de coñac y la sidra, dejamos que se evapore un poco para que pierda el alcohol.

A continuación añadimos el fumet de pescado, que habremos preparado previamente cociendo pescado, gambas o lo que tengamos o si no, puede ser de los de brick o incluso agua con unos cubitos de caldo de pescado.




Mezclamos todo bien y lo dejamos cocer más o menos una media hora.

Una vez cocido, trituramos todo con la batidora y lo pasamos por el chino, ayudándonos de nuevo con la batidora. 






Rectificamos de sal si es necesario.  Yo lo he colado después 3 veces por un colador grande, y listo para servir.



Se puede acompañar con un preparado hecho con unas gambas cocidas picadas,perejil picado y nata líquida.  En este caso le añadí nata líquida.  Espero que tengáis mejor pulso que yo para ponerla.




Nota:  Yo compré las nécoras vivas, las herví durante 6 minutos en agua salada con una hojita de laurel.  Es verdad que he leído muchas recetas donde recomiendan añadirlas crudas para que no pierdan sabor en la cocción previa, pero yo prefiero cocerlas antes, creo que están mucho más limpias y trabajo más cómoda con ellas de esta manera.  Recuerdo que para cocer marisco vivo, hay que ponerlos en la cacerola con el agua fría y dejar que hierva con ellos ya dentro, a partir de que llegue al punto de ebullición hay que contar 6 minutos.  Si el marisco está muerto, se añade cuando el agua haya roto ya a hervir.






Feliz año nuevo a todos, gracias por seguirme durante este 2012.



domingo, 30 de diciembre de 2012

Pavo con canela y clavo

Y en estas fechas navideñas no podía faltar el pavo, cada año reinvento la receta porque nunca me acuerdo de anotarla, y claro, nunca sale igual, así que este año he ido apuntándola y aquí la dejo para no volverla a perder.



Lo hago siempre el día de Navidad y como somos solo nosotros cuatro ese día, pues hago un par de patorras de pavo y pido que me las corten por la mitad.

Ingredientes: (es orientativo)

- 2 patorras de pavo (las mías pesaban 1.800 gr.)
- 70 gr. de manteca de cerdo
- 6 dientes de ajo
- 100 ml. vino blanco
- 215 ml. de coñac
- 1 y 1/2 cta. de sal
- 1 cta. de canela molida
- 1 cta. de clavo molido
- 1 cápsula de cardamomo

Preparación:

En primer lugar, yo les quito la piel a las patorras de pavo, pero no hay que hacerlo, a mi es que no me gusta nada de nada.





En un mortero machaco 4 dientes de ajo pelados, añado media cucharadita de sal, así lo machacaré mejor, también media cucharadita de canela y otra media de clavo molido.  Ponemos 25 ml. de coñac y otros 25 ml. de vino blanco y mezclamos todo eso bien con la manteca de cerdo, yo me ayudo de las varillas.


Untamos el pavo con esa amalgama y lo metemos en el horno a 180º durante una hora aproximadamente.


Con una jeringa con aguja, vamos inyectando coñac al pavo durante la cocción, yo utilicé unos 40 ml. de coñac en esta tarea.


Además, en un recipiente pongo otros 2 dientes de ajo pelados, 100 ml. de agua, 150 ml. de coñac y 75 ml. de vino blanco.  También media cucharadita de canela, otra media de clavo molido, media de sal y el contenido de una cápsula de cardamomo.  Lo paso todo por la batidora.  Con esta mezcla voy regando el pavo poco a poco durante el tiempo que permanezca en el horno.



Si ves que se va secando puedes añadir un poco de agua a la bandeja.



A mi me ha quedado con bastante salsita, y lo he servido con cebolla caramelizada, como iba detrás de una gran cantidad de comida no quise añadir nada pesado.



Espero que os guste.


jueves, 27 de diciembre de 2012

Cebolla caramelizada

Otro clásico en mi casa es la cebolla caramelizada, la hago muchas veces, pero en Navidad nunca falta en la mesa.



Ingredientes: 

- 2 cebollas grandes
- 30 ml. aceite oliva (orientativo)
- una pizca de sal
- 2 cdas. azúcar moreno
- 1 cda. de vinagre balsámico

Preparación:

Cortamos las cebollas en juliana (en tiras, en medios aros) muy finita.


Ponemos a calentar el aceite y añadimos la cebolla ya cortada.  La dejamos rehogando un ratito, añadimos la sal y dejamos que se haga bien, hasta que esté transparente.  Tarda un buen ratillo, mejor a fuego suave, no se vaya a quemar.


Una vez que la cebolla está transparente, añadimos el azúcar y removemos bien y a continuación el vinagre.

Dejamos que se haga otros 5 minutos, con cuidado de remover bien y de que el fuego esté medio.  Ya está lista.

Es perfecta para acompañar el queso de cabra, para carnes, incluso lo estoy viendo ahora en hamburguesas en algunos restaurantes.

En esta ocasión, preparé unas tostas con un rodajita de rulo de queso de cabra ligeramente gratinados y encima la cebolla caliente.


Pimientos confitados

Hay canapés típicos de cada año en la mesa por Navidad.  Unos son los de paté o queso con pimientos confitados y otros, los de queso de cabra con cebolla caramelizada.



En este caso os voy a contar cómo hacer los pimientos confitados, que es muy sencillo y siempre lo hago con antelación, lo guardo en la nevera y listo, tengo para un temporadita.


Ingredientes

- 400 gr. pimientos piquillo envasados
- 200 gr. de azúcar
- 100 gr. de vinagre (mejor de manzana)
- 50 gr. de agua

Preparación:


Es fácil acordarse de las cantidades, si os fijáis, van siendo la mitad que el ingrediente anterior.

Cortamos los pimientos, yo los corto en juliana (tiras) pero puedes hacerlo de la manera que más te guste.



Ponemos todos los ingredientes juntos en un cazo y lo ponemos al fuego.  



Vamos removiendo y dejando que se haga el almíbar, estarán hechos cuando tomen un aspecto brillante y más transparentes.  A mi me tardaron como media hora o así a fuego medio.



Lo guardas en un tupper o en un bote y en la nevera se conservan bastante tiempo.  Es muy rico para poner sobre canapés salados (paté, queso...) o para acompañar carnes asadas, etc.




En esta ocasión, yo los he servido con una tosta de paté cubierta con los pimientos, delicioso.



lunes, 24 de diciembre de 2012

Vino especiado caliente (Mulled wine)

El pasado invierno estuvimos por los mercadillos navideños de Edimburgo y hacía un frío tremendo.  Por todas partes, tanto en los bares como en los puestos de la feria y del mercado alemán, había a la venta mulled wine y siempre había gente bebiendo ese vino caliente en tazas de loza.  Yo hubiese matado por un caldito o un chocolate caliente con ese frío, pero lo único caliente que había a raudales era ese vino especiado y al final caímos en la tentación.



Al llegar a casa me puse a buscar recetas, a probar e ir variando, al final ya dejé de seguir investigando pócimas por temor a caer en el alcoholismo culinario.  Aquí os dejo mi receta, hay que tomarlo bien calentito en invierno, está ajustada a mi gusto, ahora que cada uno la ajuste al suyo.

Ingredientes:

1 botella de vino tinto (750 ml.)
1/2 limón (la piel y el zumo)
1 naranja (la piel y el zumo)
30 gr. jengibre fresco en láminas
2 cápsula de cardamomo desgranadas
3 clavos
1 rama de canela
100 gr. de azúcar
1 cucharadita de miel
1 cucharadita de anís en grano
1 vaina de vainilla abierta

Preparación:

Cortamos la piel de medio limón y la de la naranja y el zumo de ambos.  

Pelamos y cortamos en láminas el jengibre, huele de maravilla, ¡cómo me gusta el jengibre!.  Desgranamos las cápsulas de cardamomo y añadimos el resto de los ingredientes a un cazo junto con el vino.  Acuérdate de abrir la vaina de vainilla para que salga su sabor y su aroma perfectamente.


Lo calentamos sin que llegue a hervir, sino se nos evaporará el alcohol. Yo lo he tenido durante unos diez minutos a fuego bajo y luego lo he tapado y lo he dejado reposar un par de horas para que infusionara todo bien.


Lo he colado con una manga, es muy fácil de encontrar, en los hipermercados, en las tiendas de todo a 1€, etc. y con un embudo lo he embotellado de nuevo.




Puede durar un mes en la nevera sin problema.

Para tomarlo, hay que calentarlo bien, sin que hierva, incluso se puede hacer en el microondas, lo suyo es tomarlo calentito.



Es fácil y rápido de hacer, espero que lo podáis compartir con vuestros seres queridos esta Nochebuena.





miércoles, 19 de diciembre de 2012

Patatas con bacalao

¡Cómo me gusta!, pero ni a mi marido ni a mis hijos les hace ni gota de gracia el bacalao, así que lo preparé para mi madre y para mí.



Entré corriendo en el super a por una bandeja de bacalao salado y no me dí cuenta de lo chuchurrido que era hasta que me puse a desalarlo.  Así que comprad un bacalao mejor, por favor, para hacer esta receta, de momento os pondré las fotos del que he hecho.

Ingredientes:

- 1 cebolla pequeña
- 1/2 pimiento rojo
- 1/2 pimiento verde
- 1 tomate maduro
- 2 dientes de ajo
- 500 gr. de bacalao salado
- 1 kg. patatas
- 1 cucharadita de pimentón
- 100 gr. de guisantes congelados
- 1 chorrito de tomate frito
- 20 ml. de vino blanco
- harina para rebozar
- abundante aceite de oliva

Preparación:
La noche anterior dejamos el bacalao en remojo a desalar.  Le cambiamos el agua varias veces, por lo menos y como mínimo, una vez, y luego por la mañana otra hasta que lo vayamos a cocinar.

Pelamos y troceamos pequeñitos los dientes de ajo y la cebolla, ponemos a calentar un poquito de aceite en una sartén y ahí lo sofreimos un poco.

Añadimos los dos medios pimientos bien troceados y el tomate pelado y cortado en cuadritos y lo dejamos hacerse durante unos 10-15 minutos.



Secamos bien los trozos de bacalao, los pasamos por harina y los freímos en abundante aceite de oliva, reservamos aparte.


Pelamos y troceamos las patatas, las añadimos a la verdura ya rehogada, y ahora añadimos el pimentón, el chorrito de tomate frito, el vino blanco y lo cubrimos con agua, cuando está hirviendo le añado los guisantes.


Lo dejamos cocer hasta que las patatas estén blandas, entonces será el momento de añadir el bacalao que habíamos frito aparte y dejarlo 10 minutos a fuego bajo todo junto.  Debemos probar si necesita añadir sal, normalmente no es necesario.



Ya tenemos un guiso delicioso para el invierno.








jueves, 6 de diciembre de 2012

Batatas fritas adobadas

Me encanta el sabor dulce de la batata con el contraste del adobo, el problema es que no puedo parar cuando empiezo a comerlas, es una guarnición ideal para platos agridulces, para asados, etc. Os dejo la receta por si os viene bien para poner algo diferente como acompañante de vuestros platos.



Ingredientes:

1 kg de batatas
1 cdta. de pimentón (picante, dulce o mezclado)
1/2 cdta. de comino molido
1/4 cdta. de pimientas blanca
1/2 cdta. de sal
40 ml. aceite de oliva
Harina para rebozas
Abundante aceite de oliva para freir

Preparación:

Pelamos las batatas, he comprobado que es muy sencillo hacerlo raspándolas con un cuchillo, les sale muy bien la piel. La cortamos en bastones como si fuesen patatas para freir, cuidado porque se corta mucho peor que una patata, es más dura.


En un bol ponemos las batatas cortadas y añadimos el pimentón, el comino, la pimienta, la sal y el aceite de oliva y mezclamos todo bien.



Puedas hacerla de inmediato o dejarlas así en la nevera, incluso de un día para otro.

Se pasan por harina y se fríen en abundante aceite de oliva, igual que haríamos con las patatas.




Para una versión light, no las pasamos por harina y en lugar de freírlas las hacemos al horno, las puedes hacer tanto bien esparcidas por la bandeja del horno (así se dorarán mejor) o en una bolsa de asar.

Ahora las puedes usar de acompañamiento con lo que más te apetezca, a mi me encantan y pueden ser ideales para acompañar muchos platos. ¡Espero que os gusten!.