Me encanta probar las comidas típicas allá donde voy
(siempre que no sea algo que me resulte repugnante), y en Inglaterra no dejaban
de decirme que allí lo típico era un plato indio, la primera vez me lo tomé a
broma pero luego visitando supermercados y viendo que lo vendían precocinado
por todas partes empecé a creer que efectivamente si era un plato importante
allí. Como me moría de curiosidad y me encantan las especias, pues aquí
me he puesto a buscar recetas, que he encontrado una gran variedad, pero la que
más me ha convencido es la que encontré en el blog de http://cocinandoentreolivos.blogspot.com.es/.
También os indico dónde he comprado algunos ingredientes no demasiado habituales en nuestra cesta de la compra.
Ingredientes:
1/2 kg. de pechugas
de pollo cortada en tiras (aprox.)
1 cta. de jengibre
molido (lo compré en Mercadona)
2 dientes de
ajo
1 cta. de comino
molido
1 cta. de semillas de
cilantro (lo compré en Hipercor)
1 cta. de sal
1/2 cta. de
pimentón
1 cta. de cúrcuma (lo compré en Mercadona)
El zumo de medio
limón
1 yogur natural
1 cebolla
1 cda. de tomate
concentrado (lo compré en Mercadona)
1 cda. de garam
masala (lo compré en Taste of América, también lo hay en Sabores del Mundo y seguro que en muchos sitios más)
1 lata de leche de
coco (lo compré en Hipercor)
Aceite de oliva
Preparación
En primer lugar
cortamos las pechugas en tiras y las ponemos en un bol, yo las corté un poco más pequeñitas por si los niños querían comerlas, pero no quisieron ni probarlo.
Añadimos las especias
(jengibre, comino, semillas de cilantro, pimentón y cúrcuma), la sal, los ajos
bien machacaditos en un mortero o por el prensa-ajos y a todo esto le añadimos
el yogur y el zumo de limón.
Lo mezclamos bien y
dejamos que repose durante cuatro horas como mínimo, se puede dejar de un día
para otro en la nevera y así cogerá incluso mejor el sabor.
Cuando vayamos a
cocinarlo, ponemos un chorrito de aceite de oliva en una cacerola y añadimos la
cebolla picada, la dejamos hacerse hasta que esté transparente.
Ahora es el momento
de añadir el pollo que teníamos previamente marinado, también el tomate
concentrado y la mezcla de garam masala, mezclamos bien y añadimos la leche de
coco.
Ya hemos puesto todos
los ingredientes, así que ya solo queda dejar que se cocine durante unos 15 ó
20 minutos a fuego suave.
Lo ideal para
acompañarlo es un arroz basmati, a mi la mezcla me encantó. El sabor es
tipo al pollo al curry pero un poco más fuerte y se nota el toque del tomate,
si te gusta este tipo de platos, no puedes dejar de hacerlo, es muy sabroso y
seguro que repites.